Y he decidido también endulzaros este año el momento navideño con algo más facíl de consumir; (y menos peligroso para la dentadura también, dicho sea de paso.)
Y para ello, os voy a regalar una receta de las mías.
Bueno... era de mi madre; que la bordaba. Pero como la heredé yo, ya es mía; y no se me ocurre otra cosa más dulce para compartir con vosotros...
Pues ahí va:
Receta de carne (o crema) de membrillo
Necesitaremos ingredientes baratos (otra ventaja en estas fechas)
Membrillos, manzanas y limón.
Y si apetece, un chorrito de ron también. O cualquier licor dulce que se tenga a mano. Es opcional pero le da un puntito de más.
¡Se me olvidaba!... y azúcar; bastante azúcar...
Pero bueno... "Una vez al año no hace daño" ¿no?...
Modo de hacer
Se pela y trocea en daditos membrillos y manzanas; el limón sólo troceado con su piel.
Se echa la fruta a la cacerola con un pelín de agua (un dedito nada más para evitar que se agarre al principio de la cocción al fondo del recipiente hasta que la fruta suelte la suya propia)
Y se dan vueltas y vueltas y vueltas y más vueltas a fuego lento.
Mientras tanto, se saborea el aroma mágico que inunda toda la casa y se disfruta del color cada vez más cálido que adquieren la fruta... y los recuerdos asociados.
Vueltas y vueltas y más vueltas (eso sí... hay que tener paciencia, como para casi todo en la cocina...y en la vida)
Yo aprovecho también este prolongado "estar al pie del fogón" para hacer ejercicios de estiramientos varios ya que durante las fiestas, mi señor Pilates se va de vacaciones y priva mi esqueleto de su ayuda tan necesaria (risas incluídas).
Cada uno es cada uno. Y sobre gustos, colores y necesidades...
Bien... A lo nuestro, cocinera, que otra vez te enrollas.
Modo de hacer (continuación)
Cuando ya tiene la mezcla un aspecto de puré grueso, se le pasa unos minutos de batidora hasta obtener un puré fino.
Se pesa el resultado y se añade el mismo peso de azúcar.
Y el chorrito de ron.
Y vueltas y vueltas y más vueltas hasta que la mezcla adquiera un color anaranjado claro.
Llegados a este punto, tenemos dos opciones:
-O bien seguir hasta que la pasta se haga más seca y oscura y una vez enfriada en un centímetro de grosor y sobre papel de horno, se pueda recortar al día siguiente en figuritas navideñas decorativas.
-O bien (lo que yo prefiero) parar la cocción para que conserve su cremosidad y se pueda untar facílmente en la tostada del desayuno o en el bocata con queso de cabra o mezclar con la cuajada o el yogur.
O también comérsela a cucharada limpia como hacen los golosos.
O incluso rebañando el recipiente con el dedo como hacen los muy golosos de mi casa.
Y aquí tenéis parte del resultado. Espero que os guste.
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Pompita de ¡¡FELICES FIESTAS!! para todos.
Que cada uno las viva según la mezcla fluctuante de sus porcentajes.
Y como todos tenemos cerca a algún espécimen de cada clase, a los míos cercanos les digo con todo cariño...
Los Hedonistas que sigan disfrutando a tope como cada año.
Los Familiares y sus Amigos también, con calor de hogar y sonrisas.
Los Nostálgicos... que no recuerden más que al niño ilusionado que fueron; pues la Navidad es esto en su esencia ¿no?...
Celebrar (con o sin matiz religioso) la Infancia y su promesa de tiempos mejores que sólo los niños saben imaginar y construir.
... Los Gruñones empedernidos...
¡Ay!... Estos... ya no sé qué hacer con ellos... Y tengo unos cuantos a mi alrededor...
...¡¡que se metan en la cama y, como los osos gruñones y malhumorados, hibernen hasta el día 7 de enero, escuchando en bucle cualquier versión de la ópera
"La marcha de los Reyes magos" de L´Arlésienne " de Bizet!!
Es muy alegre. Y la música amansa a las fieras...
Que las Fiestas os sean dulces a todos.
Nos "veremos" en 2018. :) Supongo...