martes, 7 de febrero de 2012

Espejito, espejito...

Tiene 16 años. Va a salir...
Está nerviosa, felizmente nerviosa; y se mira y remira en el espejo.
                           Y pregunta a sus padres:
- ¿Estoy guapa?
- Eres guapa.
- ¿Cómo quién?
- No lo sé...
                            Vuelve a mirarse en el espejo.

- ¿A quién me parezco?... Me gustaría saberlo...
- A los dos... Los dos serían guapos ya que lo eres.
- Y buenos, ya que lo eres.
- Y seguro que se querían ya que tienes tanto corazón.
- Sí... pero...
- ... No tendrían otro remedio...
- Lo sé... pero a veces... siento pena por ellos...
- Y yo... (dicen los dos a la vez.)

..........................................................................

- Voy a llegar tarde. Me voy. ¿Ireís a recogerme?
- Por supuesto.
- ¡Pásalo bien y sé buena!
                                 Se ríe y les lanza besos al aire
                                 y la frase habitual:
- ¡No es compatible!
..........................................................................

Vuelve sobre sus pasos y les abraza a los dos.

Se mira otra vez en el espejo y lanza otros dos besos.
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Espejito, espejito...       El espejo no contesta.

Un espejo no refleja ni el pasado ni el futuro...
                        ... sólo el presente.

12 comentarios:

  1. La alegría de los 16 años llenos de ilusiones. Mirada en el espejo haciendo preguntas.
    Adivino unos ojos negros rodeados de rizos del mismo color. Cuántas búsquedas e interrogaciones... a quién, cómo, por qué… No pudo ser… pero algo fue y, ahora...es.

    Viento de lebeche

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  2. Hace tanto tiempo de mis "sweet sixteen"....o quizás no tanto??
    Me acuerdo perfectamente,-ay-, de mi forma de pensar, de mi forma de vestir, de mi forma de hablar...tan diferentes, aparentemente, de los de mi propia hija a esta misma edad.

    Ha pasado una generación, pero aunque no lo parezca, somos más iguales de lo que ella (y yo misma) cree.

    No sé si la mente madura a la misma velocidad que el cuerpo. Y es una pena! Cuando ahora me mismo, por casualidades de la vida, al mismo espejo al que me asomaba con esa edad, éste me recuerda la niña que fui.

    Mi abuela decía que un espejo guarda siempre la memoria de todo aquel que se ha mirado en él...

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  3. Pasado, presente y futuro...
    Tres besos y tres sonrisas para vosotras.

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  4. Me parece que a los 16 años uno se mira mucho al espejo y sólo existe el presente.
    Un abrazo.

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  5. El espejo siempre refleja tu realidad simétrica, tu "otro" presente. Y tu imagen simétrica siempre te mira a tus ojos. Eso es lo que yo denomino "El presente simétrico". Y ahondo si me aprietas: a mí me gustan los espejos hechos añicos. Cada cacho conserva un pedazo de tu presente pasado y simétrico. Y los cachos vacíos son tu futuro, aún no rellenado pero igualmente simétrico (Me he debido meter una raya de algo esta tarde...)

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  6. Tetealca, un abrazo y... te dejo a solas con Diego ;) me parece que te necesita más que yo. :D

    Diego, un abrazo y... te dejo a solas con Tetealca ;) me parece que él sabrá interpretar mejor que yo tus cachitos y tus rayitas. :D

    Mi conclusión: creo que de ahora en adelante, me pintaré la sonrisa sin mirarme al espejo... el resultado puede ser divertido :D:D

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  7. Diego, miedo me das...!!! :D :D :D

    A cuadros me quedo con tu disertación sobre los cachos de un espejo, me alegro mucho de quedarme sólo con el momentillo, jajaja...

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  8. Fram, ya me ha llegado "eso" ;) :D :D :D

    Gracias!!!!!!!! :) :)

    Seguro que le sacaré mucho partido.....

    Un beso!

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  9. :) Me alegro ;) ...allí sí, nuestro amigo Diego se volvería "cachitos" perdido con tantos espejos :D:D:D
    Besotes, guapa!

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  10. Sonrisas para ti, Mabel, sopladas desde esta ventanita ;)

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