martes, 28 de mayo de 2013

Otro "porque sí"

Hace poco, alguien me trajo otro regalo "porque sí".
Ya sabéis: una de estas cositas que brotan sin motivo, te sorprenden y te llegan hondo.

Y venía con un mensaje muy bonito que empieza así:
"Es un cuaderno, ni grande, ni pequeño..."
Terminando así:
"...Renglones compartidos."
El resto del mensaje es sólo para mí y lo guardo al abrigo de su tapa resistente.

Es sencillo, firme por su alambre espiral doble, respetuoso por su papel reciclado, discreto por su color y a la vez original por su hoja de helecho, ventana vegetal...
... creo que le vendrá bien  un rotulador verde para llenarlo de secretos
... y una cinta naranja para protegerlos.

                                                                                                                                           mía

Y no sé si os pasa lo mismo pero cualquier cuadernito corriente como los que me compro cada principio de año o precioso como lo es éste, me provoca algo de desazón infantil de principio de curso: mezcla de impaciencia por estrenarlo y dudas en decidir de qué lo rellenaré...
Puede que este cuadernito vuelva a ser árbol...
y puede que lo rellene de rayos de luna de otro planeta jugando entre la violeta de Goethe que venía con él y el muguet recién allí guardado...
o de frases recolectadas por todas partes, mezcladas con hojas vivas de los árboles que vea en la orilla de mi camino...
o de la fruta jugosa de vuestras palabras o vuestros poemas soplados como semillas al viento...
o de dibujitos míos, esbozos de pompitas o pájaros listos para volar hasta el alféizar de vuestras ventanas.
Todavía no lo sé...
Pensativa, acaricio su corteza y escucho su voz que me dice:
           "Esta mañana..."
El árbol me lo contará. Seguro.

Pompita grande en forma de beso sonriente
para quien me trajo este regalo de "no-cumpleaños": ehcebel ed otneiV.

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19 comentarios:

  1. Viento de lebeche debe ser un viento precioso de los que acarician siempre y a veces sorprenden para bien.
    Me encantan los porque sí, son los inesperados y únicos; cuando todo el mundo regala a mi me entra una ligera angustia.
    Disfruta la libreta, por dentro y por fuera:llenándola y vaciándote en ella.

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  2. Pues yo, siendo martes, le metía un rotulador rojo. Y escribía en vermellón. Y me ponía colorao, jajajajaja.

    Ahhhhhh, yo conozco un pajarito que tiene muchos cuadernitos de esos, y algunos de ellos de esos que tienen un cierre y todo, así, plan antiguo y con las tapitas que parecen de madera, o casi. Son poemarios bellísimos, y pequeños cuentos para niños, y cartas de hace ya dos décadas y media.

    Ciertamente, es una costumbre que me parece mucho más bonita que esta de la tecla, aunque esta de la tecla tenga la ventaja de dar la vuelta al mundo en 80 microsegundos y la otra, pues de vivir, amarilleando sus hojas, en lo más profundo del alma.

    Un bEsazo

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  3. Jaja...Sí, soy muy aficionada a escribir a mano en pequeñas libretitas -las tapas duras las prefiero porque las puedo poner en pequeños estantes como si fueran libritos...;)

    Framboise, en ocasiones le digo a mi marido que nunca me acostumbraré a la pantalla del ordenador, y me da que tengo razón...jaja.
    B7s

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  4. Esa mezcla de deseo y temor reverente a desvirgar un cuaderno, a mi me pasa con las cajas de lápices de colores. Desde niña me encantaba ese orden desde el blanco, los amarillos pálidos, ocres, naranjas, rojos, burdeos, rosados, violetas, azules, turquesa, verdes... hasta el negro. Esas ganas de pintar con ellos y al mismo tiempo esa lástima de romper esa uniformidad de tamaños, esa percepción de las puntas afiladas, todas igualitas, perfectamente alineadas...¿nunca has acariciado una caja de colores nuevecita?
    Vaya, me parece que aún me falta un hervor para llegar a adulta del todo.

    Un beso, Fram.

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  5. Siempre he sido un apasionado de las libretas, los bolígrafos y las plumas estilográficas.
    Por mi vida profesional he tenido que acometer muchos cambios de domicilio y algunos se han quedado en el camino. Pero los que quedan los conservo como guardianes de instantes de mi vida.
    Pero lleva razón Valaf: ahora escribes y tus letras dan la vuelta al mundo en ochenta contactos táctiles.
    Y los cuadernos solo sirven para recordar al que los escribió.
    Un abrazo.

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  6. : Marijesús, Viento de lebeche es una persona que me conoce muy bien y esta libreta es prueba de ello. Me hizo mucha ilusión y ella lo sabe :) Y comparto tu sentimiento en cuanto a los regalos que llegan todos a la vez: he llegado a sentirme incómoda también en estas circunstancias.

    :D Valaf, te ha dado fuerte con Marte hoy jaja.
    Me encantan estos cuadernitos: tengo algunos (otros se perdieron en mudanzas): empecé con 15 años apuntando cosas y cositas. Eran todos corrientes y algunos los forré de tela (hablé hace tiempo de mi cuadernito de terciopelo ;) No nací con las teclas del cacharrito pero con ganas de conservar cachitos de almas.

    Hola, "pajarito Mari", a nuestra manera escribimos un libro, lleno de las cosas que nos gustan y nos definen. Y me pasa como a ti: me siento más a gusto con papel y lápiz que con "el cacharrito de mis pesadillas" jaja

    :) Elena, lo que dices de las cajas de lápices de colores, lo dice mi hija de sus rotuladores... los admira, los acaricia...hasta que se lanza y brotan sus colores.
    Yo, como no dibujo ni pinto, nunca me he parado a pensarlo pero cuando me daba por hacer prendas de punto me pasaba con los ovillos nuevecitos: me daba algo de respeto y los acariciaba también esperando la inspiración del colorido. (rara vez he seguido un patrón para esto tampoco jaja)
    ¡Por favor, que no te dé nunca por llegar a ser adulta del todo! ;) Los adultos sin desadulterar no saben hacer tartas originales ;)

    :) Juan, has dado con la definición creo: "guardianes de instantes de vida." Y a veces da un poco de cosa pensar que algunos dan la vuelta al mundo... ¿no? Otros cuadernitos los tengo bajo llave como Mari. ;)

    Besos y sonrisas para repartir.

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  7. Tengo uno parecido que me trajo mi hija de un viaje, todavía no lo he empezado, es tan bonito que no sé si lo estropearé con mis letras. Que lo que escribas sea algo profundo que salga del corazón para que no olvides a quién con tanto cariño te lo regaló.

    Besicos muchos.

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  8. Buenas noches, ana. ¿verdad que da un poco de respeto? Seguro que tanto tú como yo, encontraremos las palabras adecuadas para nuestros cuadernitos...
    Yo sé lo que escribiría en el tuyo si fuera tú ;)
    ...Y creo que sé de qué voy a rellenar el mío... se me acaba justo de ocurrir y sé que le gustará a quien me lo regaló...ya os contaré;)

    Bizous para ti y para quien te hizo el regalo de este cuadernito tuyo.


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  9. ¡Que bonitas estas pequeñas-grandes sorpresas inesperadas!
    Siempre me paro ante los estantes desde los que me llaman los cuadernos y libretas para que las compre, pero últimamente las tengo abandonadas por este otro aparato que se llama ordenador, aunque evidentemente no hay color, la emoción de la página en blanco y el bolígrafo deslizándose por el papel no es comparable al ruidito de las teclas al pulsarlas.
    Me doy cuenta conforme escribo esto que realmente es una pena que tenga tan dejada esa costumbre de escribir a mano. Sí, creo que voy a intentar recuperarla.

    Besos

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  10. Menuda preciosidad, anda que no hacen ilusión estas cosas con encanto.
    Seguro que encuentras con qué llenarlo
    Besos

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  11. :) Jara, no sabes la ilusión que me hizo :)) El tacto con el papel es mágico... a mí, me relaja, deberías recuperar la costumbre ;)
    Besos con gotas de valeriana... o ¿ya no hace falta? ;)

    :) Mientrasleo, creo que ya lo tengo :) Me tiene ilusionada el nuevo proyectito.:)) Algun día lo compartiré con vosotros.
    Besos

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  12. jeje...que sepas que había una lagartija trepando por la taberna, jajajajaja...

    BeeeeeeeeeSOOOOOOOO

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  13. :)))) No era una lagartija sino una salamanquesa que se escapó por descuido entre los barrotes de borradores donde estaba encerrada desde el verano pasado jajaja
    Besote
    PS Puede que estuviera buscando duendes de verano...

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  14. Hola...es que tenía que estar aquí...algo mágico...encontré esta pompa al entrar a esta máquina que nos conecta(¿?)un duende picó sobre el icono?..gracias duende...
    Besos

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  15. En un día cualquiera, cercano a otro día más o menos señalado de mi viada, he tenido un estupendo regalo.
    Lectura, emoción.
    La mente se bloquea, la pluma no responde, una especie de opresión emborrona las ideas que intentando salir en tropel alocado. Sólo consiguen taponar la voluntad de expresión. Estoy paralizada, no pienso llorar al escribir gracias, pero tengo ganas.
    Privilegio. Viento mediterráneo, hoy, protagonista único en el escenario de una pompa de jabón.
    La magia de sus palabras parece convertir el sentimiento de la violeta de Goethe en el sentir de un enorme tilo.
    En algunos momentos la pompa tranquila, sosegada y viento alocado o suave, ausente o furioso, comparten caminos, rasear sendas y borduras, para aprender el secreto de las flores, observar plantas, compartir algo de lo cotidiano, hablar de libros, de música, de hijos y de muchas cosas más.
    Pompa de jabón, con una sonrisa voy ……… hoy.

    Viento de lebeche

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  16. :D mabel, veo que el duende verde sigue estando algo alterado ¿no?
    Pues otro Ommmmm ;)

    :) ¡Ay! con este Viento siempre tan excesivo ;)
    Gracias a ti por este regalo especial: creo que te gustará el relleno que le pienso dedicar...

    Y hablando de esto... una tila para cada una ;)
    Y besos con sonrisas para las dos. :)

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  17. Qué bonito! tanto el regalo que has recibido de tu amiga Viento de Lebeche como la exquisita dedicatoria que le brindas en este post. Recibir un regalo sorpresa es aún más emocionante.

    un abrazo :)

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  18. Superoriginal el cuaderno. Magnifico regalo que invita a llenarlo de momentos que no espoco.
    Un abrazo

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  19. :) Esilleviana, tetealca, un regalo sorpresa muy original y acertado en efecto. Me hizo mucha ilusión.
    Abrazos y sonrisas.

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