"Si ves un coche mal aparcado, seguro que es de una mujer."
O este otro : " La edad es fuente de sabiduría "
El sexo no tiene nada que ver para el hecho de conducir bien o mal, ni la edad tampoco a la hora de ser o no responsable.
Según podríamos deducir de lo que se ve y oye en los telediarios y más sitios, (con no alcanzo a entender qué fin oscuro), los jóvenes son unos irresponsables, los de la tercera edad unos angelitos y las residencias privadas de la tercera edad un medio de acortar calendarios antiguos y de ahorrar pensiones al estado.
Y no estoy de acuerdo. Me cansa la estigmatización sistemática por culpa de unos individuos que no representan a la mayoría.
Porque la mayoría de los jóvenes que conozco y trato son responsables con las normas necesarias para luchar contra muchas cosas como el virus y luchar a favor de otros temas como la protección del medio ambiente o la erradicación de la pobreza y etc...
Cosas que muchos añejos obvian, como si con ellos no fuera la cosa, (cuando no gruñen por el incordio que les suponen las manifestaciones o los pobres que solicitan su ayuda en un semáforo... )
No todos los jóvenes dan este espectáculo penoso de los botellones que preocupa y mucho...
Ni tampoco todos los maduritos o muy maduritos han respetado la distancia de un kilómetro de su domicilio habitual en la fase 0, invadiendo con egoísmo y sin miramiento los pueblos de los alrededores de sus ciudades, ni respetan las distancias de seguridad ahora, ni siquiera para proteger a sus propios hijos o nietos, ni les da la gana a muchos ponerse mascarillas incluso, porque son incordiosas... O las tiran en cualquier sitio,,,
Los miro a todos en mis excursiones a la calle y me asombra que un colectivo vulnerable (como se les (nos) llama ahora) se salte las normas así por las buenas (por las malas, diría yo).
Deben de pensar: "Con lo que me queda en este convento..."
No podemos generalizar ni para bien ni para mal; ni todos los deportistas son gente sana y respetuosa. Ni todas las residencias privadas son un mero negocio lucrativo donde dejan a los abuelitos tirados de mala manera. Ni mucho menos.
Tres o cuatro cosas entre muchas, sólo ésas y de las cuales no se ve (o no se quiere ver) más que un aspecto y no precisamente el más bonito.
Me cansa este deporte que consiste en fijarse en lo malo del genero humano y sobre todo en tirar piedras al otro sin recordar lo propio.
Hay tantas personas mejores en cualquier sitio y de cualquier edad...
No, una vez más, la edad no tiene nada que ver.
Y como siempre que me encuentro a disgusto con lo que leo, veo u oigo, siempre que me duele el alma, me refugio en las sabias palabras de Brassens.
Y por esto hoy os traigo una de sus canciones, de las mejores.
Siempre lúcido y mordaz, el Maestro Brassens. Y con sus guiños de humor.
Y más contundente en su vocabulario original ("con" = gilipollas, con todas sus letras) que en la traducción (tonto) demasiado suave a mi gusto.
(traducción que no obstante agradezco al autor de la misma pues por experiencia, sé lo difícil que es el traducir a un genio como él.)
https://www.youtube.com/watch?v=_LoRmD89NmM
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Pompita rompiendo lanzas
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Los estereotipos suelen tener el problema de no fijarse en la condición individual de cada personas.
ResponderEliminarComo vulgarmente se dice, no se pueden meter a todos en el mismo saco. Lo que no quita, que haya quien se aproveche de la uniformidad, para poder mantener su discurso interesado.
Y es que hay muchos gilipollas, aunque ellos no lo sepan, tengan la edad que tengan.
Besos.
Siempre que oigo afirmaciones sobre un colectivo, me acuerdo de la respuesta de Churchil cuando le preguntaron lo que opinaba de los franceses: "No sé, no los conozco a todos." No sé si es cierta la anecdota pero "si non è vero, è ben trovato" :D
EliminarY en cuanto a los tontos (o más que tontos) de cualquier edad o condición, para no generalizar, creo que entre ellos hay también buenas personas y que es en lo que únicamente nos deberíamos fijar ya que todos podemos ser el tonto de otro en un momento dado.
Un abrazo y me voy a tu papelería ;)
Bien por esta lanza. Así es y seguirá siendo Fram.
ResponderEliminarIrresponsables vemos cada día de todas las edades y como dice el Maestro Brassens....Tontos caducos y tontos debutantes siempre habrá, el tiempo no tiene nada que ver, cuando se es tonto, se es tonto.
Buen miércoles. Cuídaros.
Un abrazo.
Pues yo pensaba ingenuamente que algo se habría aprendido en los meses pasados... pero no. Ves de todo. Y es deprimente pensar que los sanitarios no paran de avisarnos a todos y parece que cada uno escucha sólo lo que le apetece, como si el asunto no fuera con cada uno. :((
EliminarEn fin... Seguiremos cuidándonos... del virus y de los que le ayudan a propagarse .
Abrazote para vosotros
Ni la edad ni el sexo tienen que ser un condicionante para nada, pero lo es por culpa de los estereotipos que la educación y la sociedad han ido imponiendo. Así somos de tontos, como muy bien nos muestra el maestro Brassens, se es tonto y punto. Y hay que reconocer que estamos en el reino de los idiotas.
ResponderEliminarUn abrazote.
Idiotas, irresponsables y tontos que no ven más allá del presente de su ombliguito. Deprimente...
Eliminar¿Para cuándo la república de los que piensan con generosidad?... (Y de varios colores ;)
Un abrazo, sin distancias aquí :)
Pues es cierto que la estupidez no es patrimonio de ninguna edad, ni de la condición social ni de, aunque pueda sorprender, la instrucción. He visto con estupor, por ejemplo, algunos contagios entre miembros de los colectivos dedicados a curar a los demás, que imprudentemente, celebran una francachela, y causan un rebrote. Son estos casos concretos que no representan a todo su sector, ni mucho menos, como no representan a todos los jóvenes los que se reúnen en botellones, ni a todos los maduros que, como cascarrabias, penetran en un supermercado sin mascarilla, quejándose de todo, los que por notorios acaban transcendiendo. Se cometen injusticias con las generalizaciones, pero aparte de que en todo grupo social hay egoistas insconcientes, también es cierto que cada individuo percibe el peligro de distinta manera, y esa visión es también una visión de grupo, y ajusta su comportamiento a su interés. Es entonces cuando la responsabilidad individual, a veces muy laxa, a veces condicionada por los hábitos sociales, nos lleva a ver las cosas que vemos.
ResponderEliminarEsperemos que al fin, vaya todo poco a poco volviendo a la antigua normalidad, que al menos a mí, es la que más me gustaba, al menos en los aspectos de la movilidad y relaciones entre las personas.
Saludos.
Los excesos son siempre nefastos. Vengan de donde vengan. O de quien. Y si bien en muchos aspectos nuestra riqueza viene de la diversidad de los individuos, hay momentos como el que estamos viviendo en que, por simple supervivencia hay que pensar por el bien común. Y no actuar sin ton ni son. Estupor y tristeza es lo que nos invade al ver todo esto.
EliminarComo si no pudiéramos esperar un poco más para alegrarnos y volver a vivir normalmente, con la movilidad que a todos nos gusta y con las relaciones sin trabas con los demás, como bien dices.
Esperemos. (de espera y de esperanza)
Un abrazo, amigo Dlt.
Qué bueno Brassens siempre, pero en estos tiempos quizá deberíamos revisitarlo a menudo, como tú bien haces, Fram. No tengo nada más que añadir, estoy de acuerdo contigo y con el maestro Brassens, el que es gilipollas lo es siempre, independientemente de la edad.
ResponderEliminarUn abrazo,
Cada cual encuentra consuelo o guía donde sea... El Quijote, la Biblia... Lo mío es Brassens ;) No me falla nunca.
EliminarY esta canción está siempre de actualidad. Por desgracia.
Un abrazo y un guiño ;)